- Chato: Vaso bajo y ancho de vino tinto, blanco o rosado.
- Bocadillo: Panecillo cortado longitudinalmente en dos mitades entre las cuales se colocan alimentos variados. (En sencillo: sanguchito).
- Pulga: Bocadillo pequeño.
- Tapa: Pequeña porción de un alimento que se sirve como acompañamiento de una bebida.
- Ración: Porción de especialidad culinaria, de cantidad más abundante que la tapa, servida como acompañamiento de bebida. Y la mejor de todas:
- Pincho: Una variedad de tapa. Ejemplo, ustedes pueden pedirse un pincho de tortilla española. Yo la primera vez que lo pedí no podía evitar reír en mi cabecita de lo diver que sonaba.
jueves, 30 de octubre de 2008
Las de hoy, las de nunca y las de siempre
lunes, 27 de octubre de 2008
Mis nuevos amigos son vecinos de Joaquín Sabina!!!
viernes, 24 de octubre de 2008
Hasta ahora, todo lo que esperaba
Ya es jueves en Madrid y ya no queda nada de jet lag. Ahora sólo queda la preocupación de encontrar un piso pronto, para no seguir molestando a Bere y Sebas, que son tan lindos! Pero hoy no voy a hablar de la búsqueda de piso, hoy les voy a contar de la Presentación de mi Máster, que si todo sale como nos lo han pintado, va a ser una de las mejores experiencias de mi vida; más que seguro.
Para los que no saben, he venido a Madrid para hacer un Máster en Cooperación Internacional y Gestión de Proyectos. Cuando la Fundación Carolina me dio la beca no lo podía creer, una semana antes me habían puesto en reserva. No pensé que me iban a llamar y sin embargo, ahí estaba el mail que decía que tenía la beca, sólo tenía que hacer un click (y no al estilo Tula) y la plaza era mía. Eso fue a fines de Junio, 4 meses después estoy en Madrid, apunto de empezar mis clases, loco.
El martes fue la presentación del curso. Nos invitaron a los 32 alumnos a conocernos y a que la directora y coordinadora del máster nos hablaran del mismo. Desde que llegué a la parada Rubén Darío de la línea 5 del metro, se me vino una muy buena vibra. El camino desde el metro hasta el instituto es una avenida que se llama Paseo La Castellana, y tal como su nombre lo dice, es un paseo lleno de árboles que además ahorita están con todos los colores del otoño, naranjas, marrones, muy bonito. Caminando un poco más llegué a la calle Fortuny cuando comprobé que esa zona verde que vi en Google Earth tantas veces estaba delante de mi, casi me pongo a saltar de la alegría. El Instituto Universitario de Investigación Ortega y Gasset, es chiquito, pero recontra lindo, tiene un jardín precioso con una linda pileta y bancas para sentarse. El edificio es antiguo y muy muy bonito. Entré para preguntar en qué aula sería la presentación, me dijeron que el aula estaba en la parte de atrás, "es el salón con 2 árboles adentro", okkkkk pensé yo... Pero ahí estaban, 2 arbolitos lindos salían de una casita en la parte trasera del instituto.
Habían 2 chicas que parecían algo solas y medio perdidas, como yo. Y claro, eran chicas de mi máster, que habían llegado temprano como yo. Beatriz y Andrea, las primeras amigas que ya hice en el máster, Andrea es de Austria y Beatriz de España. Son muy lindas, defrente nos pusimos a conversar de nuestras vidas, de dónde veníamos y todo. Yo ya estaba de muy buen humor, cuando empezó a llegar más gente y mi oído empezaba a notar la variedad de acentos en la clase. Todo parecía muy prometedor.
Por fin llegó Ruth, la coordinadora, y nos entregó nuestras pequeñas carpetas, que se llenarán de papeles a lo largo de estos meses. Y luego llegó Laura, que es la directora del máster y me cayó super bien desde que empezó a hablar. Está medio loca como yo, cosa que empieza con una idea, se va por otra, regresa, se vuelve a ir y al final nos pregunta, qué os quería decir? Pero se nota que es una capasa, esta es la 8va. edición del máster, así que ya tienen experiencia. Son como 50 profesores los que me van a enseñar, todos vienen de diferentes ONGs, Agencias de Cooperación, Instituciones, Universidades de Madrid y Europa, y cualquiera de ellos podrá ser mi coordinador de tesina y como plus, podré hacer prácticas en alguna de esas instituciones, no es genial? La currícula está genial, sólo que un poco apretada, así que me temo que va a ser mucha información en poco tiempo, but who cares???!!!! No todo es fácil, tendré que presentar trabajos casi cada semana y se nota que son exigentes, aún así nadie podía sacarme la felicidad de escuchar todo lo que me estaban diciendo, y pienso, que a ninguno de los que estábamos ahí sentados.
Finalmente, la hora de nuestras presentaciones. De 32 alumnos, 6 o 7 serán españoles, los demás, de todo el resto del mundo. Hay 2 japoneses, 1 koreana, una de Serbia, una polaca, una austrica, como 3 mexicanos, 3 peruanas, 1 ecuatoriano, como 3 colombianos, una chica de cuba, otra de república dominicana, chica, que bonito su acento! 1 australiano, 1 gringa, etc. Y por ejemplo, uno de los españoles es periodista, ha estado en Palestina y luego en África del Sur trabajando en países pobres, donde el SIDA es uno de los principales problemas de salud. Así como él, cada uno viene de diferentes experiencias.Todos estamos felices de estar acá y estamos bien abiertos a conocer gente, pues todos somos nuevos en el barrio, por así decirlo.
Al final de la presentación me puse a conversar con las otras peruanas, que han vivido poco en Lima en verdad, pero que compartimos mucho todavía. Me despedí de mis nuevas amigas y emprendí el camino para encontrarme con Sebastian y sus amigos, y en el metro aún con toda la gente medio apretada, nadie podía quitarme la sonrisa de la cara (será por eso que todos me miraban raro, jeje). Mis clases comienzan el lunes y no puedo esperar. Ojalá logre tener un piso antes, pero bueno, a ver que provee Dios estos últimos días de la semana. Por lo pronto, esta ciudad se pone cada vez más interesante, y eso que aún no tengo tiempo de hacer turismo. Eso me toca ahorita, y hacia el Centro me voy...
PD: he tenido muchos problemas para subir las fotos al blogger, no sé porqué, pero pueden buscarlas en Facebook, como siempre :)
lunes, 20 de octubre de 2008
Cómo salir de Perú y casi morir en el intento
Cómo no extrañarla
A pesar de todo el cansancio, la pasé muy bien. Micaela y Camila me hicieron olvidar todo con sus travesuras y con el "tao tao" que bailamos. Además, tenía un buffet criollo de rechupete, ají de gallina, carapulcra, seco de pato, causa rellena, chicha, bueno, ya se imaginan no? Nada como una buena comida para reponer las fuerzas. Pero luego vinieron las despedidas y empezaban también las debilidades emocionales, despedirme de mis tios y primos a quienes adoro, de mis hermanos, de las enanas, que no entendían muy bien cuando les decían que me iba a ir en avión a España. Ya el corazón se me hacía añicos, y una parte de mi tenía muchas ganas de mandar a la mierda a la beca y quedarme en Lima carajo, pero no pues, ya había tomado una decisión, además era algo que había esperado por tanto tiempo, había que seguir nomás.
Los útlimos abrazos fueron los más difíciles, y tuve que hacer esfuerzos para contener las lagrimitas que ya asomaban por mis ojos. Lo único que quería era llegar a mi asiento y dormir. Sin embargo, eso nunca lo pude hacer. Lo intenté lo más que pude, pero habían al menos 4 niños en el avión, uno lloró casi todo el vuelo, otro estaba detrás de mi, y cada vez que ya estaba apunto de entrar a sueño REM sentía una patada que me despertaba. Y como si eso fuera poco, parecía que los adultos no tenían ganas de dormir como yo, y simplemente hablaban, prendían las luces para leer, o le subían al máximo el volumen a sus audífonos para escuchar, las realmente muy malas pelis que Air Comet ofrece. Y como los asientos son hiper cómodos, estaba con un dolor de columna fatal. A las justas, habré dormido unas 2 o 3 horas. Aterrizamos en Madrid a las 5:05 am. Felizmente nadie me hizo problemas al ingresar, me sonrieron y me dijeron, bienvenida a Europa, por segunda vez, yeeee. Y para mi buena suerte, Quique estaba esperándome a la salida y puedo decir con seguridad, que no hay nada más lindo que tener un amigo que te espera en un nuevo país. Nos tomamos un taxi hasta un café cerca a la casa de Berenger y Sebastian, los amigos de Yann que me alojan, pero como eran las 6, nos entramos a tomar mi primer cafe con leche al estilo español, y un churrito, pa empezar pues!
Ya a las 7, como Quique tenía que ir a trabajar, llamé a los chicos. Quienes me han abierto un rinconcito maravillos en su depa. Y luego de conversar muy poquito, tomé una ducha, me puse el pijama y me tiré cual marmota que soy a la cama que habían preparado para mi... Eso fue ayer, día totalmente inútil para mi. No hice nada, me desperté a medio día, salí a averiguar para conseguirme un número celular aquí, que aún no consigo, y a reconocer el barrio. Resulta que nadie te cambia dólares, felizmente traje varios euros también y luego, intenté comer algo y volver a salir, pero resultó que fue más fácil comer algo y dormir algo más. Era un zombie completa, además me dolía la cabeza horrores. Ya a las 5, cuando volví a despertar, me obligué a no dormir más y ser fuerte. Sebastian llegó por la noche y me llevó por unas cañitas (chelitas) y unas tapas, lo que fue muy bueno porque estaba muerta de hambre (para variar). Y luego Bere se nos unió para otras tapitas, esta vez yo con vino, que por esta semana es todo lo que se me antoja beber, les he traido una botella de pisco, pero pienso que no la abriremos por el momento.
No pude dormir demasiado, pero no pienso que fue por el cambio de hora, sino porque creo que tengo todavía mucha adrelina en el cuerpo y mi cerebro no termina de procesar todo lo que estoy viviendo, los pensamientos me atacan cada vez que cierro los ojos. Pero bueno, hoy ya es martes, ya abrí una cuenta en el banco e hice algo de compras para cocinar. Me siento mucho mejor, más recuperada y lista para conocer este país en el que la gente habla bien..., cómo decirlo..., diferente, vamos a decir. Gracias a Dios, es una ciudad grande y llena de gente de todas partes del mundo, y hoy al volver a casa escuché a un chico decir por celular "chato, no te ví huevón", ahhhh, refrescante señores, refrescante.
Ahora creo que haré honor a las costumbres del lugar e iré por una siestecilla, jojojo. Pero luego saldré a visitar el centro, luego a la presentación de mi máster y finalmente a una expo que hacen unos amigos de los chicos acá cerca. Es raro estar aquí, al mismo tiempo estoy feliz por toda la novedad, pero por otro, creo que aún no me doy cuenta que aquí no hay combis (aunque quién realmente las extraña), que no puedo ir a comer ceviche cuando quiera, ni de que ustedes también están lejos y de que este finde, no veré a mi familia, no saldré a bailar a ritmo del arbolito, ni el domingo habrá club de la pela. Voy a seguir el consejo de Sarah y me lo tomaré poco a poco. Total, Madrid me ha recibido con los brazos abiertos, no me puedo quejar...