Los 27 empezaron hace 1 año... Ya había pasado la entrevista para la Fundación Carolina y estaba a la espera de respuesta, había empezado un nuevo trabajo y había nuevas personas en mi vida, buenos amigos que la vida siempre te pone en el camino... Mis hermanos se habían puesto bien productores, tenía un nuevo sobrino de 3 mesesitos y mis dos chiquitas crecían cada día más lindas. La vida en la casita de cartón iba de maravilla y cuando todo parecía de lo más estable, recibí el correo... "Felicitaciones, usted ha quedado en lista de espera..." jejeje, no sé porque me felicitaban si es que la beca todavía no era mía, pero me dejaron claro que si alguno de los becados decía que no, me tocaba a mi. Pensé, bueno, ya será para el próximo año... y unos días después llegó "el" correo: "Enhorabuena: Usted ha sido adjudicada con una beca.....". No lo podía creer, la beca no era completa y tenía mucho papeleo qué hacer, pero ahí estaba, la oportunidad que había esperado hacía tiempo... Un año después, no siento que mi vida haya cambiado radicalmente, pero sí que he vivido otra vida!
Llegar a España y tener que buscar donde vivir, hacer nuevos amigos (y reencontrame con otros), estudiar otra vez, después de casi 7 años de no estar en un salón de clases, estar lejos de la gente que toda mi vida me había dado estabilidad emocional y enfrentarme a un clima nuevo, bastante más frío y tener que acostumbrarme a joderes, ostias y otro poco más...Yo creo que puedo decir que me ha pasado casi de todo, porque gracias a Dios aún no me ha tocado nada demasiado malo, y ojalá que no me toque... Lo cierto es que siento que este viaje me ha ayudado a reencontrame conmigo misma. Llevaba viviendo una rutina por tanto tiempo, rodeada de la misma gente y haciendo lo mismo todo el tiempo, que en algún momento lo cotidiano fue más fuerte que yo. Me ganó el cansancio y de pronto sin estar muy consciente de ello, me encontraba cansada y la verdad, me sentía tan vieja, habían tantas cosas que me parecían que ya no correspondían a mi edad...
Hoy todo eso me parece tan lejano y es algo a lo que realmente no quiero volver... Estudiar, viajar, despreocuparme un poco por el futuro y vivir pensando en el día a día me hecho sentir joven otra vez. Hoy me río de más cosas, todo aquello que me parecía "cosa de chibolos", hoy es cosa de todos los días y otra vez siento como que la vida recién está empezando y todavía queda mucho por hacer, y claro, no hay tiempo para el cansancio (aunque sí para una buena siestita)... He conocido gente que ha tenido vidas tan distintas a las mías y que al mismo tiempo añora y tiene sueños muy parecidos a los míos... Gente que es mayor que yo en edad, pero que el espíritu es aún el de un niño. Gente que no juzga, sólo vive y deja vivir... He tenido la oportunidad de viajar un poco por el viejo continente y maravillarme con su cultura y también de atravesasr el Mediteterráneo y ver un poquito de Marruecos y enfrentarme a una cultura tan distinta, con lo bueno y lo malo... He podido aprender muchísimo del desarrollo, y de Asia, de África, de Oriente medio y próximo. Aunque ya sabía que el mundo estaba mal, no quería creer que tanto. Y a pesar de que en algún momento se me fue la esperanza, la he recuperado y pienso que aún hay cosas por hacer, aunque claro, va a ser bastante difícil...
Estar lejos de casa te hace más fuerte, pues tienes que enfrentarte por momentos a la soledad, al vacío, a que la gente falle (porque la gente siempre falla... aún si es sin intención). Y ha llegado el momento donde he sentido que no podía más y tenía tantas ganas de volver... Felizmente no se podía y más felizmente los amigos que hice aquí lograron jalarme de ahí para enseñarme que el invierno era pasajero y que con la primavera venía lo mejor de Madrid. Y porsupuesto, el verano llega a completar el ciclo, música, colores y la gente llena las calles y es casi casi como si Madrid renaciera y con ella, el resto de nosotros un poquito también... Quizás es apropiado entonces que al celebrar mi cumple aquí, no sea invierno, si un verano maravilloso al que llego sintiendo que la vida está en ordén. Y aunque no tengo idea que será después de Julio, por primera vez en mucho tiempo, no siento ni miedo, ni preocupación. Porque el futuro llegará cuando llegue, mientras, todavía me quedan 5 semanas en este continente y pienso aprovecharlas completamente... La parrillada de cumple salió genial, el ceviche también fue un éxito. El día del cumple además me llevaron a comer peruanito rico y luego por unas copitas deliciosas.
Gracias a todos por los saludos, por las llamadas, por el tiempo, por la amistad y por preocuparse porque este día lo pasará genial. Los 28 han empezado super bien y espero que terminen aún mejor. Todavía quedan algunos post en esta aventura española, que desde ya, estoy segura voy a extrañar...
No hay comentarios:
Publicar un comentario