Yannito en Madrid

Primero que nada, lo siento por la demora en este post. Como algunos de ustedes saben, Yannito arribó a Madrid el sábado 13 de diciembre, y desde esa tarde, las cosas han pasado muy rápido y no he tenido nada de tiempo para ponerme al día con este espacio. Pero como se imaginan, ESTOY FELIZ!!!! Lo estamos pasando muy bien con el pequeño muchacho, el pobre, ni bien llegó hicimos una fiesta peruana en casa, para aprovechar que llegaba con pisco, yeah!! Y gracias a mi amiga Margit, conseguí ají amarillo, choclo, canchita y pude preparar unas cosas ricas para picar también, he de decir que la huancaína fue un éxito total.

Yann se anda quejando que estoy demasiado bien acostumbrada a la siesta española, (no voy a negar o afirmar tal argumento en este post), pero lo cierto es que él ha llegado a dormir el pobre. Entre el cambio de hora y el cansancio acumulado por su duro trabajo, hemos empezado cada día un poco tarde, jejeje. El domingo visitamos rápidamente el rastro, ya que era demasiado tarde para hacer mucho más, pero luego fuimos por el centro, fuimos al Museo de Thizane... y luego a ver a sus amigos Lorenzo y Ana, muy lindos ellos, nos invitaron cafecito, chocolate para mi y luego un vinito, hummmm... Terminamos la noche cenando en Lavapies en un resto hindú buenotototote y barato, sobretodo barato, jejeje.

Durante la semana aprovechamos para hacer un poquitín de shopping y para que vea las partes de Madrid que no conocía, resulta al final que la ciudad española le gusta más de lo que pensaba, jejeje... También aprovechamos para que conociera a algunos amigos míos del máster y ante todo lo previsto, Yann logró ver a Berengere, que la pobre, como buena arquitecta, anda a full con su chamba y casi casi no la vemos; felizmente, logramos tomarnos unos traguitos juntos.

Yannito me dio una sorpresa bonita, me llevó a unos baños árabes, Hamam, o algo así; súper bueno. Eran 3 piscinas, una de agua tibia, otra de agua super caliente y otra de agua fría. También había un sauna, y podíamos ir de piscina en piscina y al sauna a nuestro gusto. Nos recomendaron empezar con la templada, luego la caliente y luego la fría para activar la circulación. El agua estaba riquísima y le ponía hierbas y cosas para que te relaje aún más. El sauna me ahogaba un poco, pero a Yann le hacía mucho bien. No pude meterme mucho al agua fría, normal no? jejeje Pero igual estuvo buenote, todo el mundo anda calladito, porque es un sitio de relajación. El tratamiento incluía unos masajitos y luego un almuerzo árabe delicioso. Debo decir que mi novito no me hace sorpresas todo el tiempo, pero esta le vale por un buen ratito :) 

Y bueno, ahora ya estamos en Francia, hemos pasado por Toulousse, ahora estamos en Montpellier y mañana nos vamos a Gap (los alpes) para ver al resto de su familia y pues, pasar navidad ahí, en medio de la nieve, increíble no? Pero eso ya será una historia para el fin de semana, porque ahora vamos a preparar unas cositas para comer, ta pronte mes amis!